Charlas entre dos personas, separadas por grandes espacios geográficos o temporales, pero unidos por aficiones comunes. No hay aquí elitismo o diferenciación entre los participantes, sólo igualdad y libertad de expresión. Puede ser un lector de Isaac Asimov, un admirador de Frank Frazetta, un coleccionista de obras de Robin Wood o analizadores del Eternauta. Son coloquios, a veces con opiniones coincidentes, a veces con discrepancias, en el Planeta Tierra. - M. C. Carper
lunes, 13 de febrero de 2012
Alejandro Aguado - Dibujante de Historietas – Editor de Duendes - Historieta Patagónica
Invitado de Hoy: Alejandro Aguado - Dibujante de Historietas – Editor de Duendes - Historieta Patagónica
Hola ¿Quién eres? Preséntate con tus palabras, por favor.
Me llamo Alejandro Aguado y en Patagonia creo soy más conocido por mis 8 libros de investigación del pasado de la región, soy dibujante, editor y estudié Comunicación Social. Excepto por el dibujo, los otros trabajos me encontraron a mí.
¡Ocho libros! Habláme de ellos ¿Sobre qué trataban?
Los libros son investigaciones del pasado de la región central de Patagonia. Hacia 1992 se me había dado por dibujar temáticas históricas relacionadas con la región donde vivo, historietas que publicaba en el principal diario de la región, pero al poco tiempo me quedé sin bibliografía de referencia, porque no había mucho escrito. Comencé a recorrer los alrededores de la ciudad en busca de imágenes para dibujar y en una serie de cañadones que rodean a Comodoro (es montañoso en la costa) fui encontrando una serie de pueblos abandonados y en varios de ellos vi que los unía un ferrocarril, que tampoco existía. No había casi nada de bibliografía al respecto y comencé a indagar entre viejos pobladores y ferroviarios y así surgió el primer libro, mezcla de testimonios e ilustraciones. No encontraba editor y un día envié una muestra fotocopiada al gobierno de Chubut. Me llamó en persona el Gobernador para ofrecer editarlo. Imagínate, tenía 22 años y el Gobernador asistió a la presentación de mi primer libro.
Ese libro me fue internando hacia el interior del territorio y con el transcurso de los años terminé publicando ocho libros que develan la historia del sur de Chubut, la mayor parte inédita hasta entonces. Como no soy un historiador en el sentido de hacer “historiografía”, sino que un dibujante que estudió comunicación social, ideé un estilo de libros que se basan mucho en relatos (basados en miles de páginas de documentación oficial y testimonios) e imágenes, con lo cual han tenido una enorme repercusión, en todo sentido. Hoy se utilizan para estudiar en colegios primarios y secundarios, en universidades de 7 países (EEUU, Francia, Holanda, Australia, Chile, Inglaterra y Argentina), se filmaron dos documentales basados en ellos (un largometraje no se llegó a concretar), por invitaciones a presentarlos y dar charlas viajo por la región y el exterior, se han publicado notas en medios nacionales (en Radar de Página/12 una nota de 2 págs., por ejemplo), asesoro a autores cuando me lo requieren, me tratan con respeto tehuelches y mapuches que me han abierto las puertas de su cultura (no es algo fácil esto), me han nombrado Socio Honorario de una Sociedad de Historia en Chile, el año pasado Vecino Destacado de Comodoro Rivadavia, etc.
En muchas de las regiones en que se basan mis libros, me hacen sentir que soy del lugar. Es algo hermoso, sobre todo por lo que se vive y aprende.
También tengo publicados otros seis libros, pero de historietas. De ellos, solo tres se conocieron a nivel nacional.
¡La Patagonia! Yo viví medio año en Esquel, el viaje fue impresionante, pero me di cuenta que solo los tipos duros pueden vivir allí. A mi me tira más el trópico, je, je, las playas. Contá, por favor, como es el lugar donde vivís.
Es cierto lo que decís. Lo que veo es que fuera de Patagonia no se tiene idea de lo que es vivir en esta región. Un ejemplo son las distancias, es como que no entienden que sea normal hacer 300 – 500 km en una tarde y que es lo normal cuando se viaja. Pero para mí, que me gusta vivir la aventura del conocimiento (en el sentido de conocer viajando, explorando), es una región ideal para ello ya que la historia de miles de año aflora a cada paso. El paisaje se conserva tal cual era como hace miles de años, no fue modificado como en la región pampeana. El pasado reciente y lejano convive con el presente. A Patagonia la conocen más lo extranjeros que los propios argentinos. La Patagonia “auténtica” no es la turística, es la de tierra adentro. Y las ciudades grandes, bueno, son iguales en todos lados, sin importar si es de Patagonia o no. La imagen que impera de Patagonia a nivel nacional es una imagen estereotipada, que la construyeron para sí mismos. No tiene nada que ver con la “auténtica” Patagonia, con la real. Y esto último que comento es algo que se refleja (mal) en el cine o en la historieta. Y tal vez esa sea una virtud de Patagonia, que permite múltiples interpretaciones.
Para que te des una idea, en mis investigaciones terminé desentrañando que la historia del suroeste de Chubut, es muy similar a lo que refleja la película “Danza con Lobos”.
¿Cómo empezaste a aficionarte a la Historieta?
De muy chico. Tengo unos tíos que visitaba mucho, que leían todo tipo de historietas, de humor e historieta seria nacional, de cuando se podían conseguir cerca de 30 títulos distintos por mes en los quioscos de revistas (años 70). Toda su casa parecía una enorme biblioteca de historietas. Como los visitaba muy seguido, me hice aficionado. Más grandecito, con 10 o 11 años, comencé a comprar y a canjear en negocios dedicados al canje y venta de revistas usadas, o en puestos callejeros (andaba bastante en la calle, que no era tan peligrosa como hoy en día).
¿Y cuando sentiste el impulso de empezar con el dibujo?
No recuerdo de cuándo, pero con 10 o 11 años ya hacía mis propios fanzines (mediados de 1982), los que repartía entre los amigos del barrio. Eran malas copias de historietas que leía en El Tony, Fantasía, D´Artagnan, etc. Quién diría que con los años conocería a muchos de aquellos autores y hasta trabajaría con algunos.
¿Estudiaste Historieta o sos autodidacta?
Soy autodidacta con guía. Aunque la mayor parte del secundario lo hice en una escuela técnica, egresé de la escuela de arte de la ciudad y tuve como maestros a un gran artista plástico de la región, a un escritor-dibujante de una ciudad vecina y a la distancia a Ignacio Noe, tremendo dibujante que hoy trabaja casi exclusivamente para Europa e hizo muchas de las tapas de la vieja Fierro. Pero mi principal formación fueron las revistas de historietas, sobre todo la vieja Fierro, donde me apodaron “El aluvión del chenque” (en 2009 apareció en un festival de Rosario un memorioso que me recordaba por ese apodo). Leía y leo de todo, pero cuando apareció la vieja Fierro mi cabeza hizo “clic” y ya nada volvió a ser lo mismo. No por algo, aquella revista de los 80 fue elegida dos veces como “la mejor del mundo”.
¿Qué temas te gustan en los dibujos y las historietas?
Comencé dibujando temas fantásticos, hasta que conocí a un pintor que me dijo “tus dibujos están muy buenos, pero no tienen punto de contacto con tu tierra” y eso me movilizó mucho. Desde entonces esa se volvió una de mis temáticas preferidas, sumado a que también me volví investigador de su pasado inédito. Las otras giran en torno a la propia historieta y a temáticas surrealistas que ya publicaba hacia 1991 y que los lectores identificaban como “raras”. Hoy esa temática se ha vuelto bastante común.
Explícate un poco ¿A qué te referís con temáticas raras?
Con temáticas “raras” me refiero a que hacía una tira de temática surrealista, desde 1991, del personaje llamado “Chiri Von Fiesta”, cuando no era para nada común que se publicaran ese tipo de historietas. Con el nuevo siglo ese tipo de historietas se popularizaron y hasta se volvieron algo cotidiano, pero entonces era algo muy desacostumbrado. Un ejemplo actual sería Liniers, el principal referente de ese tipo de historieta. Se podría decir que las hice “antes de tiempo” y en un lugar que no permitió que se conocieran a nivel nacional (no existía Internet, por ejemplo). Son los gajes de vivir lejos de donde se cocina todo en este país.
¿Cuál es tu aspiración? ¿Fama?
Con 20 años de edad comencé a publicar varias veces a la semana en el principal diario de la región donde resido, con lo cual me volví muy conocido y supe lo que era la “fama”. Un ejemplo: ir a un consultorio odontológico y mientras esperaba que me atendieran, la secretaria y una mujer hablaban de mí sin saber que yo estaba parado a su lado escuchándolas. Eso me resultaba chocante. En base a ello puedo decir que la fama por si misma no sirve para nada, es algo para el ego, no es algo que me guste porque el ego suele ser muy mal consejero. Mi aspiración es hacer lo que me gusta, me interesa usar el lenguaje de la historieta como medio de expresión, para expresar ideas, transmitir conocimientos entreteniendo. Básicamente hacer lo que me gusta y cuando uno hace las cosas con gusto, eso se transmite en el trabajo.
Sabés, fue Taro Defossé quién me pasó tu mail. Estaba en una feria de comics y vi una mesa que decía “DUENDES”. Por supuesto, conozco la editorial desde hace tiempo, más después de hablar con José Massaroli. Así que no resistí y me acerca a conversar. También estaba allí Mariano Antonelli que me obsequió “A través de los Andes” ¡Está buenísimo! ¿Cómo empezó DUENDES?
Los orígenes de La Duendes se remontan a 1991, cuando comencé a editar la primera revista de historietas de Chubut, “Duendes del sur”. Luego la revista agrupó a autores de toda la región y pasó a llamarse “El Espejo. De los dibujantes del sur”, del que se publicaron 89 números. Fue una tremenda movida que agrupó a casi 60 autores de todas las provincia patagónicas. A nivel nacional casi no se conoció, pero llegamos a estar en contacto con la gente de “El Víbora” de España, publicábamos a autores de “El tripero” (alumnos de Alberto Breccia), generábamos eventos y festivales por toda Patagonia, y hasta Fontanarrosa envió páginas de Inodoro Pereyra para que se las publicáramos gratis. Fue una hermosa aventura.
Pero al final, la década menemista nos terminó haciendo pelota, como a casi todo en el país.
Hacia mitad del 2007, en un ataque de nostalgia se me dio por regresar con la revista y el grupo. La revista pronto mutó a revista libro hasta transformarse en una editora de libros de historietas, en generadora de contenidos de historieta o sobre historieta (blog de La Duendes), tanto en papel como en Internet.
Le gente ni se imagina el trabajo descomunal que demanda, en todo sentido. A veces creo que si tuviéramos un buen apoyo económico detrás (se hace todo a pulmón, con fondos propios), se podría generar algo bastante importante y para muchos.
¿Qué es lo que te hace juzgar si una historieta es buena o mala?
Los años y la experiencia del hacer y leer mucho, es como que te entrenan el ojo para ver un trabajo y saber si es de alguien que ya tiene detrás un camino recorrido, si hay un trabajo depurado. Un trabajo de calidad se nota a simple vista, sin importar el estilo o línea gráfica o estética que sea. En cuanto al guión, si la historia es sólida y está bien narrada. Y en historieta, dibujo y guión se tienen que complementar.
Así es. Y me parece magnífico que un dibujante sea el director de arte de una revista. Muchas veces vi que adoptan ese rol gente que no sabe de técnicas ni de los fundamentos principales del dibujo. Y es como un tipo que no sabe nadar criticando los estilos de un nadador profesional. Para un dibujante se nota enseguida que detrás de DUENDES hay un criterio magnífico ¿Habías pensado en esto?
La verdad que no lo había pensado. Pero lo que si siempre tengo presente, que es un criterio que aplico en todo lo referido a La Duendes, que se valora por igual a toda la historieta, sin importar estilo, estética, género, temática, etc. Lo que importa es la calidad y originalidad ante todo, tanto del presente como del pasado. Calidad en cuanto a la maduración gráfica de cada autor y originalidad respecto de las propuestas/temáticas personales. Se podría decir que es algo que aprendí de la primera mitad de la vieja Fierro (en la segunda mitad se fue cerrando sobre sí misma), que era una revista amplia, que cruzaba estilos, tendencias, géneros, lenguajes.
Y algo que es muy importante, me despego del papel de dibujante para transformarme en un lector que disfruta del trabajo de los colegas, pero analizando con ojo de dibujante. No cualquier dibujante puede ser editor, porque al ser editor uno tiene que optar la mayoría de las veces por relegarse a sí mismo para ceder el lugar a los colegas. Eso representa una lucha con el ego, que solo podés afrontar a cierta edad cuando ya tenés un camino recorrido, cuando la búsqueda de “trascendencia” tan común en las artes, pasa a un segundo plano.
La idea también es rodearse de “buena gente”, que no es poca cosa.
¿Qué es la Historieta para vos?
Es un lenguaje con características propias, un lenguaje que te permite comunicarte narrando.
¿Crees que hay público para lo que haces?
Si, lo hay, lo compruebo desde hace muchos años. Lo que hago se podría decir que no es “popular” ni pretendo que lo sea porque mi búsqueda es ante todo personal, pero tratando de no hacer en algo “críptico” porque eso se termina volviendo elitista.
¿Tienes un e-zine favorito?
Me gustan mucho los trabajos de mis colegas en Historieta Patagónica y de varios sitios de Francia, Italia y España. Los franceses están “picando en punta”, haciendo un arte hermosísimo con la historieta. Hacen “vanguardia” en serio, muy atractiva visualmente.
Seeee, la historieta europea me encanta. Encontrás maestros a lo loco en Francia, España, Italia e Inglaterra ¿Leías revistas del viejo mundo? ¿Cosas como Metal Hurlant, 1984 o 2000 AD?
Leía y leo mucho Europeo. De antes, Címoc (aventura clásica con calidad excepcional), Zona 84 (una maravilla creativa), Comix Internacional (cómic de autor de altísima calidad), Cairo (la vanguardia estética de los 80), El Víbora (hermosamente irreverente), Tótem (y a través de ella su material francés de Les Humanoides) y muy poquito de Metal Hurlant porque casi no la conseguía.
Lo loco es que cuando uno conoce ese material extraordinario de la vieja Tótem de los años 70, por ejemplo, y se ve lo que hoy nos muestran en el país como vanguardia experimental. ¡¡Entendés que ya fue hecha hace 40 años en Francia!! Y si querés, hace 50 años en EEUU, 30 años en Italia, y se puede seguir enumerando.
Fui tres veces a Europa y de allí traje un material que hoy es inconseguible en el país.
¿Hay algún autor contemporáneo que sigas?
Puf, son muchos y de los estilos más variados. No se si escribirlo porque sería un extenso listado de autores argentinos, españoles, franceses, de Canadá y EEUU.
¿Cuál es tu autor favorito?
No tengo uno en particular, sino muchos y diversos. Me pasa como en la respuesta anterior, que tendría que exponer un largo listado.
¿Según tu parecer, Los autores de Historieta colaboran entre sí o son individuos aislados?
Si tienen un proyecto en común o si son amigos, colaboran entre sí, en caso contrario son individuos aislados. La misma profesión impone aislarse.
Es cierto. ¿Qué opinas de los guionistas y escritores?
No sabría bien que responderte, porque también escribo y tengo 8 libros publicados de forma individual y otros colaborando como guionista.
¿Es importante la divulgación de las novedades sobre Historieta?
Si, es importante, pero realizada con responsabilidad y un criterio amplio. Hay sitios de divulgación y análisis de enorme calidad por los conocimientos sobre el lenguaje que evidencian quienes los realizan y su amplitud de criterios. Pero también los hay muy pobres de mirada y hasta prejuiciosos. Los menos, contados con los dedos de las manos, son algunos que bajan “discurso” para tratar de imponer una visión que responde a intereses propios. Estos últimos provocan mucho mal porque mienten y confunden a los nuevos lectores (¿Será esa su intención?). Pero si uno es un lector experimentado se detecta fácilmente cuál es cuál.
Hmmm, hay de esos en todos los ámbitos. En lo personal creo que las reglas están para respetarlas sin ser esclavos de ellas. Hay gente que se mueve como dictadores diciendo: esto está bien y esto está mal. Es muy soberbio eso. Por años mis dibujos eran duros, rígidos. Cada vez que hacía algo recordaba los cursos tratando de poner todo lo que me enseñaron en cada viñeta. Con el tiempo me di cuenta que eso no sirve, que uno debe elegir con total libertad que herramientas va a usar para narrar y dibujar mejor dentro de su personalidad. Así que dije. ¡A la mierda las reglas! Lo mismo me pasó como escritor de ciencia ficción. Yo sé que mucha gente conservadora no comparte esto y me parece muy bien. Prefiero ser honesto conmigo mismo a hacer cosas que le gusten a otros, pero no a mí ¿Cómo editor te encontraste con esta clase de interrogante?
Las reglas son fundamentales cuando un autor se está formando, tanto en lo estético como en la narrativa específica a la historieta. Una vez que eso está asimilado, recién podés comenzar a romper las reglas para arribar a tu propio tono de narrar. Cuando hoy te dicen que podés iniciarte haciendo cualquier cosa, te están metiendo en un atajo mentiroso que te va a limitar. Es importante conocer las reglas, para luego poder romperlas, claro. Es el camino que han recorrido todos los grandes maestros del mundo.
¿Qué opinás de la autoedición?
En un país como Argentina, en el que se destruyó lo que era una industria, creo que es una necesidad.
Triste pero cierto. ¿Te animás a opinar sobre algún editor?
La vida, el lugar donde resido y ciertas características del mercado editorial argentino me hicieron transformarme en editor (rol que nunca pretendí ocupar). En la región donde resido, Patagonia, hay pocas editoriales o son muy limitadas en su estructura y si son de algún estamento del Estado en general funcionan muy mal. Tuve muy malas experiencias con varias editoriales regionales. Eso me obligó a comenzar a editar mis propios libros y armar toda una estructura. Por suerte, me fue bien y desde hace unos 15 años varios de esos libros son best Sellers (con repercusión en el exterior), lo cual permitió que me expandiera para editar historietas.
A ello se suman ciertas características del mercado editorial argentino, que se concentra básicamente en la ciudad de Buenos Aires y allí solo suelen editar a los autores de renombre que residen en la ciudad, a no ser que sean autores del llamado “interior” que sean muy conocidos (contados con los dedos de la mano). Y como solo editan a los que son muy conocidos en Bs As, te obligan a autoeditarte y con ello te obligan a ser “editor”.
Otro aspecto que me parece muy negativo, es que hoy suelen manejarse criterios de edición basados en el “amiguismo” (no todos, obvio), lo que a la larga termina atentando contra la calidad y contra el profesionalismo necesario para generar una industria. Los países del mundo que cuentan con “industria”, lo poseen porque se basan en el profesionalismo, al menos en el caso de la historieta. En Argentina, hasta los 90, con sus aspectos positivos y negativos, los medios que funcionaban se basaban en el profesionalismo.
De forma muy resumida, porque todo me obligó a seguir un camino de editor, es que hoy la editora La Duendes lleva editados 30 títulos sólo de historieta, en cuatro años, con distribución nacional.
Y puesto en papel de editor y sabiendo lo difícil que es editar, la idea básica de La Duendes es que los autores de La Duendes – Historieta Patagónica dispongan del sello para que puedan alcanzar su libro o que vean trabajos suyos impresos en papel, en ediciones decentes.
Já, já. Esto no se lo dije a ninguno de los invitados a estos diálogos: ¡Sos un genio! ¿Ves televisión?
Hace poco me mudé a una especie de chacra, en las afueras de la ciudad donde resido y no tengo TV. Extraño más que nada ver ciertos programas. En la tele hay de todo, hay programas de enorme calidad y de la calidad más baja que se pueda llegar a imaginar. Lo que más me gusta es ver películas.
¡Ahh, yo también amo las películas! Son como historietas con sonido y movimiento. Bueno, la estructura de los guiones tiene puntos en común ¿Qué tipo de películas mirás?
Miro de todo, mucho “dramático”, pero tengo el corazoncito puesto en la ciencia ficción y el western de calidad (no todo). Lástima que hoy estos dos últimos son géneros que se realizan poco y cuesta conseguir buenas películas al estilo “2001”, “Blade Runner”, “Alien” (la primera), “El jinete pálido”, “Silverado”, “Danza con lobos”, por solo citar algunas. Es decir, películas donde lo que importaba ante todo era el buen guión, antes que el exceso de efectos especiales.
También siempre fui fana del cine argentino, del que se desarrolló desde parte de los 70 a los 90, que me parecía del mejor del mundo. Hasta que apareció “el nuevo cine nacional”, que construye historias que no narran nada, vacías. Básicamente lo mejor pasa por ciertos directores y ciertas películas: El Juan Moreira de Leonardo Favio, la mayoría de Sorín (“La película del Rey”, que no se si es la mejor lejos del cine argentino), casi todo de Aristarain (“Un lugar en el mundo”, de lo mejor de nosotros), La Patagonia rebelde, la mayoría de las películas de Mignona, casi todo de Trapero, de Campanella (“El mismo amor, la misma lluvia”, de lo mejor del cine nacional), el cine documental de Pino Solanas, Bielinsky y un largo etc.
Ese cine que enumero, es un cine que habla de nosotros, de nuestra historia, nuestra forma de ser, que nos refleja y analiza. Es un cine de altísima calidad que surge de mirarnos a nosotros mismos y desde nuestro lugar en el mundo. Y si se quiere, se lo puede trasladar a la historieta. La historieta argentina vivió sus mejores momentos de mercado y creativos cuando se la pensaba para el propio país, para su propia gente y con una mirada propia. ¿Les suena El Eternauta, ideada para el lector nacional?
¿Qué opinas sobre los adelantos tecnológicos en la vida diaria?
Que son fantásticos. Todo lo que se transforme en una herramienta que te facilita la vida o el trabajo, me parece espectacular.
¿Qué pensás de las nuevas formas de comunicación? ¿Y las redes sociales?
Internet me parece una de las tecnologías más espectaculares que se han podido desarrollar. Con redes sociales como Facebook tengo una gran lucha interna, porque por un lado tienen el aspecto positivo que te permite comunicarte muy bien, pero por otro lado le veo aspectos un tanto negativos que tienen que ver con el narcisismo o el perder el tiempo cuando hay una vida por vivir.
Son elecciones, amigo. No nos enseñan a saber elegir, eso lo aprendemos como podemos y así estamos. Ahora los chicos siguen aventuras a través de juegos de video o historias en cine condicionadas por el merchandising ¿Pensás que eso reemplazará a los comics?
No, no creo. Siempre se dice que los nuevos entretenimientos basados en nuevas tecnologías atentan contra la historieta. Sin embargo, los países donde se lee y produce más historieta son también los que tienen más desarrolladas y tienen más propuestas de entretenimientos basadas en nuevas tecnologías: Japón, Francia, EEUU. Que la historieta se venda mucho o no, tiene más que ver con lo que se le ofrece a los lectores. Si se hace una historieta con pretensiones elitistas, no se debe esperar tener muchos lectores, es algo básico.
¿Por que pensás que en la opinión general, la Historieta es tan infravalorada?
La historieta es infravalorada en los lugares donde la historieta cuenta con escasa tradición, con poca historia y presencia. Esa baja valorización se basa más que nada en el desconocimiento del lenguaje y en la falta de costumbre de leer historietas.
¿Imaginás que algún día conquistaremos el espacio como en Star Trek?
Es posible, pero no con las tecnologías de propulsión de hoy en día. Se tienen que desarrollar otras tecnologías. Pero habría que hacerse una pregunta: ¿para qué se lo quiere conquistar, para destruir otros planetas como se está haciendo con el nuestro? Lo que motiva la trama de Star Trek es el conocimiento y nuestra sociedad actual se basa en la explotación indiscriminada de recursos. Entendiendo esa diferencia se puede suponer para qué se buscaría conquistarlo.
Ahí tocaste un tema muy interesante. Uno escucha muchas opiniones en la vida. A los optimistas, a los pesimistas, a los que eluden la realidad… Yo trato de pararme en el medio de eso y es muy difícil porque apenas nacemos comienza el condicionamiento, Cuando era adolescente me parecía lógico y normal que el hombre depredase e incluso extinguiese a seres como las ballenas. Hoy esa idea me es insoportable, no puedo matar ni una mosca. También quería ser millonario y pensaba que el hambre, la guerra y la esclavitud eran cosas del pasado. Pero no, existen hoy en día. Ningún sistema de gobierno se ha preocupado por evitar la corrupción y forman bandos que se pelean como mafiosos usando al pueblo de tribuna. Obvio, estoy generalizando. ¿Pensás a veces en el futuro de la humanidad?
¡¡Gran pregunta!! Creo que en algún momento en que nos apartamos un poco del ruido de lo cotidiano, es una pregunta que todos nos hacemos. En particular cuando conocemos cómo está cambiando el clima en el mundo por acción del humano, cómo se va depredando y contaminando todo para que las economías de unos poquitos países del primer mundo no se vayan a pique. Pero no se puede estar todo el tiempo pendiente de eso, sino no se puede vivir.
A través de mis investigaciones sobre el pasado, lo que he visto es que la corrupción existió siempre. Lo que cambian son las formas, o que desde los 90 el periodismo lo comenzó a difundir abiertamente y que nunca fue tan destructiva como en los 90.
Si hubiese un holocausto climático o ecológico ¿Qué harías?
Supongo que tratar de sobrevivir, irme a vivir a algún lugar apartado de Patagonia. Habría que retomar la forma de vida de los indígenas. Pero no sé si valdría la pena ver un mundo destruido… ¡¡este mundo es tan hermoso y no alcanza una vida para conocerlo!!!
¿Cuál es tu película de COMIC favorita?
La última de Bátman, con el guasón que se “roba” la película.
¿Crees que los autores de Historieta son nerds o ratones de biblioteca despegados de la realidad?
Como hay de todo en las sociedades, hay de todo en el ambiente de la historieta. De todos modos, hay que tener muy presente que esto del dibujo obliga a estar muchas horas frente al tablero, en cierto modo te aísla.
Lo sé, se hace difícil asistir a las reuniones que hacen los amigos, ja, ja. ¿Cuál fue la última historieta que leíste?
Estoy leyendo varias a la vez: la revista italiana Animals, la revista española El Manglar, releyendo algunas viejas revistas de editorial Columba (redescubriendo algunas joyas de la historieta “popular”), fascinado con Bone de Jeff Smith, libros de Ken Parker de Ivo Milazzo en edición italiana, releyendo en libro Peter Kampf de Trillo y Mandrafina y Fantagás de Carlos Nine (exquisito).
¿Pensás que alguien leerá este diálogo?
No sé, espero que no les resulte de lectura pesada si alguien se le anima al texto.
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genial¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminarPues yo me he saboreado la entrevista de pe a pa! Qué gustazo conocer a Alex, ojalá me invite a colaborar en la Duendes. Mis respetos Alex, dibujas fenomenal y no cualquiera se embarca en editar historietas y en promover a los colegas. Un abrazo desde México, ojalea te des un tiempillo para ver mis historietas y mis Ondas Fraguianas (fragacomics.blogspot.com)
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